30 de mayo de 2007

Hamaca

Dónde hay una hamaca?
Antes iba lejos y volaba.

Me llevaba a donde nadie estaba.
Antes iba lejos y volaba.

Y te acordás de lo cerca que quedaba la luna?
Sé que no la conociste pero llegabas.
Aunque no te acuerdes, yo tengo la imagen
guardada en mi alma retenida.

Dónde hay una hamaca?
Me dijeron que no hay, que se escapan.

24 de mayo de 2007

PIDO LA PALABRA


El colegio está tomado. Toma rimbombante y estruendosa que surge en un momento increíble e inentendible. Anotemos los puntos claves por los que la toma se está llevando a cabo, sacados de las palabras de los voceros/comunicadores estudiantiles de la misma:

1)"Este reclamo, esta toma, no es en particular por la designación DE Virginia González Gass sino en repudio al método por el cual ella fue elegida"

2)"Nosotros vamos por el Consejo Directivo y por la unidad académica"

3)"Nosotros tenemos una propuesta de transición que es: primero, que González Gass sea declarada interina y que tenga que sea referendada apenas se declaren los consejos resolutivos; y segundo, tener un Consejo Asesor con carácter resolutivo del Colegio, el cual tiene un carácter consultivo actualmente."


(Ambos sacados del testimonio dado a TN hoy a las 9:30 aproximadamente, que pueden ver en http://www.clarin.com/diario/2007/05/24/um/m-01424931.htm)


Estos son los únicos datos que pude encontrar en toda la Web (contando el maravilloso e informativo Foro del Colegio, así como la mismísima página del C.E.N.B.A.).


La toma comenzó ayer, luego de la desginación de la nueva rectora y, según el centro de estudiantes, "es por tiempo indefinido hasta que se abra una instancia de diálogo". Por lo pronto, hoy a las 18 horas se realizará una asamblea donde se analizarán las propuestas, las charlas y las discusiones tenidas con profesores, entre alumnos y demases, y se verá cuál será la resolución con respecto al fin de semana y al lunes que viene.


Dicha toda la información que pude recabar, y no confiando en trnascriptos, sino en las fuentes de los mismos estudiantes, ahora opino yo.

Ante todo, pido que no mientan a la gente cuando hablen del colegio. El colegio tiene 2000 alumnos (aproximadamente), y según comentarios de la misma nota citada, 900 de ellos estaban a las 9 am en la asamblea. El 24 de marzo se realizó la primera asamblea del año, en la que estuvo presente por razones de fuerza mayor: se instalaron en frente de nuestra aula. Ya que estaba ahí, decidí quedarme para ver qué proponían y cuánta gente iba, en comparación con la del año pasado a la que también fui. Sin exagerar, a la hora de comenzada la asamblea, no había más de 60 personas que poco a poco se levantaban, iban, volvían, pero no estaban conscientes y atentas a lo que se discutía. Bah, "se discutía", era un extenso monólogo de un grupo (no estoy segura de si era comisión o cúpula directiva) del centro de estudiantes. Pero ese monólogo tenía un fin: convencer a los 60 chicos, en su mayoría de 1º y 2º (aunque debo decir que vi caras familiares de 4º y 5º) de sus propuestas. Como siempre, no proponen los temas limpiamente, de manera clara y concisa, sino que le dan vueltas, retoman discusiones llenas de polvo, y terminan quedando 4 para votar.

No puedo decir que alla sido así esta asamblea por la toma porque sería mentir descaradamente. No estuve ahí, así que evidentemente no puedo discutir la convocatoria. Sin embargo, hoy a las 9 de la mañana tengo muchísimas dudas de que hubiesen 900 estudiantes en el colegio, y paso a explicar porqué.

Suponiendo que lo que dicen los periódicos sea cierto, 200 estudiantes estuvieron ayer acampando en el colegio, defendiendo la posición del centro. Ahora bien, muchos de ellos debían ser de la mañana, o aunque sea una especie de tercio aproximadamente. Durante la noche estuve leyendo los comentarios en el foro (único espacio para leer posiciones de los estudiantes, aunque sea medio monopólica, ya que nadie se atreve a criticar nada, por las dudas) y los que decían de ir a la mañana para la asamble era de la tarde/noche. Los de la mañana aclaraban que iban a ir a ver si tenían clases y luego verían que hacían si no había. Ahora, si hicieron lo que yo, si a las 6 am llamabas al coelgio, específicamente te decían que no había clases porque el colegio estaba tomado. Muchos deben haberlo hecho y no deben ni haberse acercado, en particular los más chicos, a los que les cuesta más convencer a las madres (experiencia vivida). Entonces, no creo que a las 9 am hubiese 900 estudiantes. Podía haber 900 personas dentro, contando directivos y profesores, pero ¿900 estudiantes?, no estoy muy convencida.


Con respecto a los pedidos, debo decir que estoy de acuerdo con uno: el Consejo Asesor debe ser resolutivo, sino, es una monarquía del rector, que hace y deshace sobre todos los temas a piacer. Ahora bien, los alumnos (y ahora sí me cuelgo de escuchas radiofónicas) no pueden elegir qué profesores pueden dar clase y quiénes no. No tenemos ni el derecho ni la capacidad pedagógica ilustrada como para entender qué programas de estudio son los mejores. Somos ESTUDIANTES SECUNDARIOS para todos los que lo hayan olvidado. Cuando saquen el título en Ciencias de la Educación, cuando hagan Pedagogía, Psicología, o un X profesorado, hablaremos. Por lo pronto, y desde lo cognitivo, no tenemos los conocimientos.


Luego, la forma de elección de la rectora no fue una "imposición" como dice el centro en su página. Actualmente, la elección de rectores de los colegios pre universitarios se realiza por el Consejo Superior de la UBA, nos guste o no. Y así, por medio del consenso de los poco miembros que se pudieron comunicar con Hallú, se le permitió la elección por un decreto "ad referendum" (Nota: esto es lo que dice Hallú, si es verdad o no, escapa a mis posibilidades de conocimiento).

Si es "ad referendum", significa que tendrá que ser ratificado. Entonces, ¿por qué no pedir que seamos parte de ese consejo resolutivo o referendum nombrado que afirme, en lugar de crear una afirmación paralela estudiantil dentro del colegio, que tendrá validez sólo dentro del mismo?


Por último, y lo más importante: perdieron de vista, de foco, todo lo que lograron el año pasado. Se jugaron por la toma y la consiguieron, cosa que restableció cómo debía funcionar el estudiantado en el colegio, y dejó de lado la tiranía del rectorado. Pero ahora desviaron el camino, se metieron en un tema pantanoso, en el momento más oscuro. La propuesta de los consejos resolutivos podía presentársele a González Gass y, si no la tomaba, entonces realizar la toma. La idea de la interinidad de la nueva rectora creo que es el único punto por el cual la toma está bien ubicada en tiempo, y debo decir que yo creía que iba a ser nombrada interina, no permanente, más allá del referendum a pronunciarse.


Y ahora sí, de verdad termino, están haciendo una toma que, para el afuera, no tiene fundamentos ni bases claras. Yo desde acá trato de buscar porqué lo hacen, cuál es la finalidad, qué gana el colegio con esto y me tomó una hora encontrar los tres puntos citados arriba. Traten de demostrar porqué lo hacen, porque sino, en el mundo exterior, quedan como una manga de pendejos al pedo en la vida, que no entienden nada de nada y que como no quieren tener clases toman el colegio con alguna excusa estúpida. Están buscando algo importante. No importa quién esté de acuerdo o no, pero acuérdense que siempre pesa más algo con un valor mancomunado, como el que quieren que tenga el próximo rector, y no algo impuesto, de manera poco clara y difícilmente explicable.


PD: Conrespecto a eso de que "si nosotros tomamos el colegio, nosotros tenemos el poder de decisión sobre todo", bueno, no. No podemos decidir todo. Hay algunas cosas que respetar. Si bancan la causa, aguántense que los profesores estén en contra y den clase. Uno no soporta una posición sólo estando a favor y dejando de lado a los que están en contra, sino es muy fácil. Hay que bancarse la contra, la oposición y aprender a enfrentarse a pesar de las consecuencias. Dejar afuera del colegio a profesores y preceptores, fue la salida fácil para evitar tener que decidir si realmente todos los que estaban ahí adentro se jugaban o no por la toma. Si uno sabe que no tiene falta y que no hay sanción, es fácil estar ahí adentro, proponiendo y discutiendo, pero si la falta y la sanción aparecían, ¿cuántos de los que están ahí dentro ahora se hubiesen ido?


----------------------------------------


Fe de erratas: todas las faltas de ortografía (un "alla" por aquí, algunas dislexias tecladísticas por allá) son por escribir rápido y con algo de lo que se llama pasión el texto. Pido disculpas y espero que comprendan.

10 de mayo de 2007

Como debe ser

7:30 AM:
Sonó el despertador. Auténticamente despierta, Sofía observó como todos los días cada uno de los rincones ocultos de su habitación, casi como si pudiese ser el último día. Después, siguiendo con su auto-instituida rutina, respiró profundo, sintiendo el aroma que desprendían los jazmines del balcón. Sabía que era peligroso, pero hacía mucho tiempo que había decidido que, si iba a vivir, iba a vivir bien, y a ella le gustaba despertarse así. Suavemente se levantó de la cama y apoyó los dos pies en el suelo plastificado. Otro día más que llevar adelante.

Hacía diez horas que no dormía y el insomnio estaba ganándole a mi paciencia. Sonó por centésima vez en esa noche el teléfono y volví a ubicar mi voz en el casillero de “Hola, mi nombre es Daniel, ¿en qué puedo ayudarlo?”. Cuando la mujer, que por la voz parecía una señora mayor con serios problemas para entender las nuevas tecnologías, casi en un grito histérico al mejor estilo de Skrik, decidió usarme como “puchinbol” y luego cortarme al sentirse frustrada por su incapacidad técnica, miré con rencor el reloj de la PC, esperando poderme ir. Por suerte, ya marcaba las 7:30am.

10 AM:
Caminó dos cuadras hasta el subte y no se enojó cuando vio que estaba suspendido. Retrocedió las mismas dos cuadras para tomar aquel colectivo que, si bien tardaba tantísimo más que el subterráneo para llegar al mismo lugar, le permitía reencontrarse con su ciudad. Recién en este retroceder se permitió observar un cartel pegado de mala manera, inclinado y con dos esquinas ya despegadas. Era uno de esos carteles que había visto tantas veces, pero recién ahora, cuando no creía que entenderlos le sirviera, Sofía les prestaba atención. Llegó el colectivo y se subió pensando en que, si quizás les hubiese prestado atención antes, ahora no estaría yendo a Lima 340.

Así como el cansancio me había irritado, también me hizo tropezar mientras volvía. “Abrilo con cuidado, sin usar dientes ni tijeras”. El contraste entre el naranja y el blanco me llevó a leer el cartel que se encontraba frente a mí cuando me levanté. Honestamente, cuando veo los carteles, las charlas, la efímera preocupación de todos los medios y de la gente sobre el SIDA el primero de diciembre, no puedo creer en otra cosa más que en que somos hipócritas y no nos importa en realidad. Por lo menos, a mí no me preocupa, porque me cuido y no me va a pasar. Lo único que me preocupó en ese momento fue correr para alcanzar el colectivo.


1 PM:
Caminó hasta el subte y se alegró de que ya hubiese vuelto a funcionar. Antes de alejarse de la oficina que recién había visitado en pleno centro, Sofía se preocupó en volver a contar por centésima vez los remedios y asegurarse de que no le faltaba nada. Con todo confirmado, bajó las escaleras, compró su pase y entró al antiguo sistema de rieles que tanta gente utilizaba para ir y venir pero que, a diferencia de ella, no valoraba como elemento artístico. “Esta estación sería una buena locación para mi corto”, pensó. Subió y se resignó a entender que, a diferencia de lo que le pasaba a otros compañeros, a ella no le darían el asiento, por más cansada que se sintiera.

Mientras disfrutaba de mi colchón, soñé con la noche que iba a venir. La esperaría con velas y una cena romántica, para que no pareciese que estaba tan desesperado. Hacía seis meses que no la veía y no podía esperar más para tenerla entre mis brazos y sentirla de nuevo. Me acomodé de costado y, con sonidos suaves del arrullo del viento entre los pétalos de las flores que ella me había dado hacía tanto tiempo ya, concilié el sueño y empecé a imaginar todo lo que no podía durante el día.


3 PM:
La llave entró en la cerradura con dificultad, como siempre, porque nunca quedó del todo bien esa puerta después del problema de humedad. Dejó las bolsas sobre la mesada de la cocina y prendió automáticamente la radio. Recorrió estaciones y ninguna la conformó, así que la apagó y prendió la televisión. Encontró un programa en el que, para variar, hablaban del SIDA en el día internacional de la lucha contra el SIDA. Por primera vez en veintitrés años sentía que le encantaría que esa misma charla se viese el tres de octubre, el diecisiete de julio y el cinco de enero. Se sentó en la cama, subió el volumen y prestó atención al especialista en el virus, y escuchó lo mismo de siempre: “todavía no hay cura, todos saben, pero se están haciendo avances impresionantes en la investigación”, “la mejor cura es la prevención”, “los jóvenes de entre quince y veinticuatro años son las principales víctimas del SIDA, que afecta en la actualidad a unos 40 millones de personas en todo el mundo”, y otras yerbas. Ahora Sofía comprendía todo lo que escuchó tantas veces y aprehendió tan pocas.


Sin poder dormir por la excitación de lo que pasaría esa noche, me levanté de la cama y prendí la televisión. En el canal en el que la había apagado la tarde anterior, hablaban del VIH, lo que no me sorprendió, siendo primero de diciembre. De todos modos, no sé bien que decían, sólo me preocupaba en ese momento qué comeríamos, qué me pondría. Tenía que verme bien para ella. Me costó tanto convencerla...Seis meses!


7 PM:
Entró a bañarse y eligió un buen baño de inversión. Estaba cansada, agotada, pero era una buena noche para despejarse y alegrarse un rato. Estuvo sumergida hasta que las sales se volvieron agua, salió a la loza caliente y agradeció haberle hecho caso al arquitecto. Siempre se preguntaba si sería él la única persona que conocería por completo su hogar. ¿Su hogar? Quizás si ella no podía conocerlo, entonces era el hogar del arquitecto, y simplemente su casa. No, esas eran pavadas. Tomó el vestido negro escotado y, junto con las sandalias de taco aguja y la gargantilla, hizo el conjunto más sexy que podía crear.

No sé.. no estaba conforme con el arreglo en la mesa. Reacomodé las velas. Ahora sí. Estaba feliz con el resultado. Me fijé que estuviera el CD en el equipo y disfruté del aroma de lo que estaba en el horno. Dejé que toda mi alma se regocijara en ese aroma y me senté a esperar que llegara el momento.


9:30 PM:

Tocó el timbre, y esperó frente a la puerta. Ese era el día para decirle porqué tardó tanto tiempo en llegar a esa instancia. Era dfícil, pero sabía que era el único que no iba a asustarse. Cuando lo vio disfrutó de ver su presencia, pensó en lo hermoso que era y en lo que lo quería. Sabía, después de mirarlo a los ojos, que podía confiar en él.

Estaba hermosa. Saludarla fue el mayor placer del día, sin lugar a dudas. No sabía que podía sentir eso, pero ella era la persona correcta. La única que me podía llegar a hacer feliz. Pero, cuando la miré a los ojos, vi algo que no estaba bien. Algo que ocultaba, o que no quería ocultar pero no podía evitarlo.

12 AM:


Las miradas se cruzaron. Una fue para abajo, resignada. La otra, no salía de su asombro. Hasta que salió. Y sonrío. Destruyó el silencio y dijo:

Te amo.

Más allá de todo.

Como debe ser.

GENTE LINDA








-Fóbico... pero lo que tengo de fóbico, lo tengo de buen tipo...
-Que vivo a la defensiva... y la nariz, que es lo más...
-Tres kilos de más... que van a seguir conmigo mientras el mundo tenga asados, sábados y amigos...
-Una alergia al sol... que me hizo conocer al dermatólogo, que hoy es el papá de Rosario y Manuela.
-Si todo volviera a empezar, volvería a ser lo que soy...eso incluye los dientes...

Para los que nos sentimos privilegiados por no ser divinos, impecables, rutilantes, espléndidos. Para nosotros, la gente linda.Para los que no buscan ser perfectos.


1) Pelada--- =)
2) 1,58 (con tacos)
3) ME CUESTA DELEGAR
4) Pareja dispareja
5) Canaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas!!!!!!!
6) Me como las uñas
7) Bailo pésimo
8) Ella ronca

Sentirse bien es una elección...

27 de abril de 2007

La Noche

Nunca pensé que las luces del centro pudieran estar tan prendidas y apagadas al mismo tiempo. La noche las ha encendido, y las ha descendido para entusiasmarme. Lo que no sabe es que no va a ser tan sencillo, porque uno de sus ángeles me ha lastimado. Lo entiendo, esto es como un resarcimiento, pero nada podrá arreglarlo. Los mares no son tan fáciles de secar, ¿saben? El hecho es que este cuervo, que parecía increíble cisne al atardecer, removió en mi ser un conjunto de cosas que no debían ser tocadas. Las cambió de lugar, las desarmó, las investigó. No se dignó a reubicarlas, a rearmarlas, a no mirarlas. Simplemente, no se animó.
Ahora, los sonidos dentro de mí se hacen más profundos que los de afuera. Las luces no desaparecen, y el ritmo del movimiento no hace más que hacerme volcar la tinta de manera irregular, lejos de lo que deseaba. Sin embargo, nada tan real, tan parecido a mi ser ahora. El cuervo ha desaparecido hace ya largo rato, pero la noche ha entendido lo que él hizo, y no deja de hacer nada para reivindicarse. Igual no alcanza.
Las luces se vuelven más lentas. No sé si es mi relato, mi movimiento o la niebla que existe en mí lo que las desacelera, pero ahora se mueven más despacio. Creo que la música (que el azar eligió sólo para mí, en una mezcla de honor y castigo que no tiene límite aparente) también ha contribuido.
Como un suspiro, las luces terminan por desaparecer. En un delirio negro, que no fue creado por nadie más que el cuervo, la noche y todos sus intentos se alejan de mí. Puede haber sido lo sincero, lo malo, lo horrendo; puede haberme cansado el sufrimiento. Por ahora, lo único que sé, es que hasta aquí llegaron mis lamentos.

Érase una vez


Érase una vez el recuerdo de un relato. Dicho recuerdo, retenido y olvidado al mismo tiempo, descansaba paseando por interminables laberintos de tiempo y espacio, en los cuales se iba mezclando y borrando con otros relatos.


Érase una vez el recuerdo de algo. Dicho recuerdo, casi olvidado al tiempo, descansaba en interminables laberintos donde se mezclaba mientras se fusionaba con otras historias.


Érase una vez un relato. Dicho, recordado y casi al mismo tiempo, en interminables laberintos de tiempos y espacios en los cuales se iba mezclando y borrando.


Érase una vez un relato del recuerdo. Dicho ese relato, el recuerdo casi recordado, descansaba en interminables laberintos, que en tiempo y espacio, no podía ni mezclarse ni fusionarse con otras narraciones.


Érase una vez un autor que retomó todos los relatos, todos los recuerdos, todos los relatos de recuerdos y todos los recuerdos de relatos, los separó por medio de mentes en blanco y los rearmó y fusionó, borrándolos por medio de espacios y tiempos, creando otra historia.

20 de marzo de 2007

Kindda what I can't tell

I'm goin down, goin down once again
I'm fallin down, fallin down once again
I just can't stop lookin you're prayin to be
I forgot all the things that you said just to me

Let's pretend there was nothing else to do
Let's pretend you were the last one to fool
Let's just show them that they were wrong
Let's forgive all the things we have lost
And I, I don't know when I'll be ready to leave
And I saw too many lights to know right now which one I should believe
And I, I don't feel I'm in place of
leaving behind all the things that I've done
to me
to us

I've hidden the dark between my two own eyes
I've reached my own self and right now I will cry
I've seen yourself with and without mine
I've told myself to run away and denay it all from now

Let's believe we were the right perfect ones
Let's believe you've done everything and none
Let's undo what you feel there's no need to have in our minds
Let's pretend we're the right ones

And I, I don't know when I'll be ready to leave
And I saw too many lights to know right now which one I should believe
And I, I don't feel I'm in place of
leaving behind all the things that I've done
to me
to us

Sorry for lettin you just know all these things
through this song
Sorry for makin not real,
let you not believe

And I, I don't know when I'll be ready to leave
And I saw too many lights to know right now which one I should believe
And I, I don't feel I'm in place of
leaving behind all the things that I've done
to me
to us

13 de marzo de 2007

Sinmuelle

Rompió los muelles y zarpó
Desplegó las alas y voló
Subió al abismo y saltó
Abrió las puertas y salió

Suenan tambores de verdad
Suenan acordes sin timbrar
Suenan palabras que juzgar
Suenan tus noches nada más

Suspicaz abrís tus ropas
decidida a volver a empezar
Accionás esa palanca
y nada cambia, sigue igual...

Surco los mares y volvió
Visitó nubes y cayó
Cruzó de orilla y perdió
Cerró las puertas cuando llegó

Silencio de ostras en el mar
Mariela escucha la verdad
y entiende que no hay final
Destruye sueños por soñar

Suspicaz cerrás la noche
decidida a no mirar nunca más
Accionás las estrellas
y nada cambia sigue igual...

Y así querés volver
sin lugar al que correr
Y así querés volver
sin lugar en el que ver

Carmen

Carmen se acomodó frente al televisor, sin más excusa que la de esperar el llamado. Ya no podía contar ordenar los estantes, ni lavar la ropa, ni escuchar música, ni leer su libro, porque no quedaba espacio en ella que albergara otra cosa que su recuerdo. Mientras las imágenes se sucedían sin ton ni son de manera indefinida e interminable, Carmen rogaba que todo esto no se realizara, que fuese sólo una sensación y no un sentimiento.
Acomodó la espalda contra el respaldo, y en un intento de autodestrucción, ladeo la cabeza hacia la pantalla, intentando compenetrarse en eso que tanta gente encontraba fundamental y divertido. Entonces la vió: era una imagen maravillosa de algo tan parecido a su más terrible pesadilla y a su más preciado sueño que parecía irreal. Escuchaba como las voces parecían completamente armónicas y afinadas, como los colores eran siempre brillantes y opacos, y como, sobre todo, las miradas eran absolutamente hipnóticas. ¿La historia? Pues no importa, no era fundemental. ¿Los diálogos? Explícitamente olvidables. ¿La escena? Cada vez más real.
Había un hombre. Había una mujer. Había un niño. Había una niña. Había una vida. Había otra. Había casi un era completa, generaciones y generaciones detrás de las caras. Había susrros que parecían gritos, había reproches que parecían pedidos de disculpas. Había una entrada, una salida, un escape, una salvación, una respuesta, una veng...

RINGGGG!
-¿Hola?
-Hola.
-Ah, hola. ¿Cómo estás? (la sonrisa podía oírse a kilómetros de distancia)
-Bien bien. Tenemos que hablar, hace mucho que no lo hacemos.
-Es verdad...
-Tengo tanto que contarte, tanto que decirte.
-¿En serio? Yo también tenía ganas de hablar con vos.
-¡Ay, cuándo la conozcas!
-¿Qué?
-Si, a mi novia.


"...It's meeting the man of my dreams, and the meeting his beautiful wife..."

15 de febrero de 2007

Segunda oportunidad

Daiana se levantó negándose a creerlo. Otra vez le había ganado el silencio. Había tantaas palabras que ella conocía, y tan pocas para utilizar en ese momento. Pasó semanas pensando como unirlas, cruzarlas y hasta relacionarlas de modo sutil y mágico, con el único fin de dejarlo anonadado y a su vez extasiado en esa pasión que sólo crea lo que uno quiere cuando no puede tener.
Separó la llave de la puerta de su casa una cuadra antes, más preocupada de que no se le subiera la minifalda que de que la llave fuese la correcta. No se equivocó, quizás gracias a ese sexto sentido que llamamos rutina. El monoambiente cambiaba tantas veces de tamaño en el día que no le alcanza con entrar una sola vez para descubrir cada uno de sus rincones. Ahora solamente sabía que era infinitamente chico para albergar toda su pena y vergüenza.
Sonó el timbre. Esperaba que fuese alguien equivocado, como cuando no queremos hablar por teléfono pero suena y no podemos no atenderlo; pero no. "No es mi día de suerte", pensó. Esquivó su mirada de manera casi furtiva, como una presa a punto de ser cazada, porque en el fondo, antes de mirar por la mirilla, ya sabía de quién se trataba.

- ¿Qué pasa?
- Te escapaste, de nuevo. Era tu segunda oportunidad. ¿Cuántas pensaste que ibas a tener, que te iba a dar?
- Lo sé, por eso no me quejé. Simplemente decidí que no estaba lista para enfrentarme.
- En fin, como siempre, te acobardaste. ¿Tanto te cuesta quererte?
- No es que no me quiera, es que no me quiero tanto.
- No importa, el punto es que tenías una segunda chance y la dejaste ir. No quiero oírte después.
- No lo vas a hacer.
- No pienso darte otra oportunidad.
- Y si me la dieras, probablemente haría lo mismo que ahora.
- Cobarde.
- Ojalá al menos me sintiera bien de no enfrentarme, pero solamente me lastima más.
- Me voy, y espero que te acuerdes de mí, porque no pienso volver.

Daiana nunca se había arrepentido de nada. Hasta esa noche. Su conciencia la estaba matando.

Lying is the most fun a girl can have without taking her clothes off

I wanna be naked. I wanna show you all what makes me cry about you.

That's probably everything in and out of you.

Si no hablo, nada terminará.

7 de febrero de 2007

Patetismo real

Avasallada por lo vivido, dejé que se desatara la tormenta sin quejarme. Mientras el agua caía sin rencor al sol que la había evaporado, mi mente funcionaba casi como con un piloto automático.
Prefería el anochecer en soledad que de a varios. Esa necesidad que tiene el ser humano de estar en constante conexión con el resto de la humanidad aunque no soporte más la falta de individualidad me enerva, siempre lo hizo. Sin embargo, me dejé llevar por el estado de ingravidad en el que me encontraba y me permití el secreto placer que todos encontramos en observar y sentir los dramas ajenos. Un personaje patético y empecinado en ser perfecto mejoró mínimamente mi noche, y me permitió deshacer cualquier malestar que me llevase a las pesadillas.
Desperté en algún momento surrealista de la noche, con una contractura que (ya sabía) duraría semanas, y con la cabeza donde usualmente descansan los pies. El televisor insistía en aullar suavemente, como cantando la canción de cuna más eficaz para mi sueño. Me acomodé y volví a mi espacio personal.
La mañana no se apuró en llegar para mí, pero no me preocupó. Nunca creí eso de amanecer más temprano para conseguir favores. Sin embargo, algo me inquietaba. Una de esas sensaciones que las mujeres recibimos como don con la costilla y que le sacamos al hombre. Mi llamado "Sexto sentido" me avisaba algo pero, para variar, no sabía qué. Ni si era bueno, o malo, o más o menos o qué sé yo. Era un algo indescriptible e inentendible.
Me miré al espejo y como todos los días, no me hallaba en la imagen. Pero esta vez algo era distinto, algo no cerraba en mi reflejo. Era como un juego de niños, de esos de las diferencias entre dos dibujos. Cuando me cansé de buscarlas, seguí mirando mi fotografía momentánea por puro capricho. Y como lo que no se busca es lo que se encuentra, me sentí una ganadora cunado encontré mi diferencia. Mi imagen era ese personaje patético que tan poco había hecho la noche anterior para atraer mi atención.
Lo más extraño de ese día fue que nadie pareció darse cuenta de la diferencia. O convivía con un grupo de ciegos por decisión, o se habían acostumbrado tanto a no mirarme cuando me hablaban que jamás lo notarían. Sólo mi compañero de despacho me dijo que tenía algo distinto, pero creyó que era el corte de pelo, lo elogió y se dejó llevar por la usual rutina.
Avasallada por lo vivido, dejé que se desatara la tormenta sin quejarme. Mientras el agua caía sin rencor al sol que la había evaporado, mi mente funcionaba casi como con un piloto automático. Total, no había nada que pudiese ser más raro que ese día, tan parecido al anterior y tan distinto al mismo tiempo.
Creo que debo ser la única persona que es retratada en un personaje patético y triste, y en vez de sentirse identificada, transforma su para vivir como él.

25 de noviembre de 2006

No sé

No sé qué quiero, qué siento, qué puedo, qué tengo dentro de mí. Ya perdí lo que me tenía tan confiada de tenerte: el saberte a mi lado, cerca de aquí.
No tenés nombre, ni imagen ni sonrisa. O sí. El punto es que estoy confundida, perdida en el medio de la nada y del todo, de demasiadas cosas que me forman y me deforman, acompañándome así.
Contaba con mi alma, con mi vida, con mis sentidos y mi felicidad. Ahora que todo se aleja, que todo parece perdido, que no parece quedar nada más, ¿de dónde debo agarrarme para poder despegar?
Parece como si lo que vivo fuese mentira, como si lo que respiro fue irreal, como si lo que siento no estuviese acá.
Y ya no sé qué espero. Como siempre, me confundo con lo que parece cierto y sincero. Como siempre, no lo es, todos lo sabemos (menos yo) . Debería ser tan fácil jugarme por lo que deseo, pero el problema es cuando una no sabe exactamente qué es eso. Una autopista en mi cerebro me comprime momento a momento sin saberlo. ¡Tantos que han actuado para formarla aquí adentro! Y tampoco lo saben, y no lo lamento. Nadie sabe nada de lo que siento, no tienen porqué, no necesitan saberlo.
Pero a veces no alcanzan los segundos para desarmar el alma al viento. Menos que menos para entregarla por completo. No alcanzan las letras de abecedarios ni sueños de mundos distintos al nuestro. No creo que haya nada en este planeta parecido a mi sentimiento. No por original, no por no darme aliento, sino porque no entiendo que quepa en cualquier otro pecho.
Sonríen los que alguna vez causaron tormento. Es sencillo cuando no entienden que lo que hicieron fue imperfecto, porque no lo causaron por un momento, sino que quedó para siempre, dentro de miles de cuerpos. Pero los cuerpos son lo de menos, porque sólo muestran cómo el alma se decide a escapar al tiempo.

23 de noviembre de 2006

Rencorosa no


Puedo perdonar mi estupidez de dejarme impresionar por situaciones anormales, el dejarte darle a mi vida un giro de 180º sin preguntar, la ilusión que creí que era pero no, el omnubilarme por la música.
Pero hay ciertas cosas que no puedo perdonar: que me hayas quitado lugares de mi ciudad que ahora no producen en mí más que llanto, que me hayas quitado también parte de la felicidad que la música produce en mí, que las óperas y los pianos ahora tengan gusto a lágrimas.
Todo tiene un límite: no podés lastimar a alguien así (aunque haya sido sin querer o sin darte cuenta, lo hiciste).
No necesito un cuento, no necesito un poesía para decirte lo que entendí hoy: aunque lo intente, no puedo perdonar estas pequeñas cosas, tan grandes para mí.

5 de noviembre de 2006

Buenos aires

Buenos Aires, 2 de noviembre de 19...
Querida Clara:
supondré que tu carta se ha extraviado en el correo. Todos conocemos lo desordenado que es el sistema postal en este demente país. Desde nuestro último encuentro, demasiadas cosas pasaron. Deberían interesarte, si todavía recordás a ésta, tu antigua ciudad y, claro, a tus antiguos amigos.
Sabés ya que María sigue viviendo en la cada de Artigas y Avellaneda, a pesar de su pequeño receso. Pablo, por otra parte, se ha ido. No pudo seguir viviendo con su hermana, la relación estaba cada vez peor. Hace dos meses que se ha marchado, pero supongo que ya te lo deben haber contado.
Lamentablemente, el día de la mudanza no fue nada ameno. Si bien había sol, la lluvia no hizo nada fácil el traslado. Además, la falta de Pablo para encargarse de las tareas pesadas casi nos impidió enviarle muchísimas de sus pertenencias. Ni que hablar de la presencia de María que, para variar, obstaculizó el proceso, molestando a los hombres de los canastos, musicalizando poco felizmente nuestros movimientos con desafinadas óperas de Bach, y destrozando la mitad de las cosas de su hermano. Bueno, la mitad de lo que todavía no había destrozado.
Cuando te fuiste, hace ya casi cuatro meses, sabés que las cosas por nuestra cuadra no estaban tan mal. Tu fugaz paso marcó en nuestras vidas algo especial, como un quiebre. Pablo preguntó tantísimas veces en los dos meses antes de irse si sabíamos algo de vos. Como pediste, nadie le dijo nada. María, por el contrario, no se preocupó demasiado. Estaba tan ajena a todo, que ni voluntad de acordarse de tu rostro tenía.
Como si la medianera de casa se hubiese vuelto de papel, puedo contarte los diálogos (discusiones, al fin y al cabo) entre María y Pablo en esos dos meses, pero no lo entenderías, como ni yo los entiendo. María mantiene su idea de que vos no te fuiste, de que estás todavía en tu hogar, por eso también, creo, no ha preguntado por vos. Es divertido verla cantarle las canciones de Mary Poppins a tu puerta. ¡Qué pena que siga gritándole a su hermano! Es como si no reconociera que se ha ido.
Más allá de todo esto, te transcribo lo que recuerdo del último diálogo que escuché. Creí que, quizás, vos me podrías ayudar a entenderlo.
Pablo llegó ese lunes tarde. No, no estaba espiándolo, simplemente me lo crucé porque estaba barriendo la vereda. Bueno, apenas entró, María (como todas las tardes), le reprochó su encuentro con vos. No sé qué cantidad de historias pasaron por los aires de mi medianera. Que vos no te habías ido, que vivías con Pablo otra vida, que él tenía otros hijos, que habías ido a la casa de los mellizos y le habías contado todo. Por supuesto, Pablo hizo lo imposible por negarlo. Que te irías con el a Francia, que se llevarían todos los ahorros, que la dejarían con el resto sola en esa casa, que destrozarías la relación. Por supuesto, Pablo hizo lo imposible por negarlo. Que la visitabas en sueños, que la llamabas todo el tiempo, que le impedías salir de la casa para quedarte con él. Por supuesto, Pablo hizo lo imposible por negarlo. Que no los dejaría en paz, que los buscaría por cielo y tierra hasta encontrarlos, que los destrozaría uno por uno todos los segundos de sus vidas. Por supuesto, Pablo no pudo hacer más para negarlo. Le dijo que todo era cierto, que se iría con vos y que no los podría encontrar jamás. Se encerró cada vez más en un grito ahogado, mientras empezaba a caer el rocío nocturno. María se calló de repente.
Hasta el viernes siguiente, no se escuchó más que un golpeteo en las paredes y canciones de ópera romana cantadas en francés (antiguo, aparentemente) por María.
Más allá de la locura de María, lo que le dijo a Pablo fue exagerado. Creí incluso aún más exagerada la reacción de la melliza, que llamó, harta de oír el redoblante de cemento improvisado sonar, al Borda para que aislara a Pablo.
Finalmente, ese sábado Pablo se fue. Se lo llevaron temprano. Lo sé porque la sirena de la ambulancia no opacó los gritos de terror del mellizo. No entendí muy bien lo que decía, pero entendí un par de veces tu nombre, tu "Lisette" nocturno y tus otros tantos apodos.
No sé si Pablo llegó o no al hospital. Mientras te escribo, María termina el tercer acto de "Turandot". Creo que se ha ido a dormir, porque escuché la puerta cerrarse y dejó de cantar. Si tu respuesta no llega pronto (no importa si son una par de meses), haré la denuncia al correo y te volveré a contar las nuevas novedades.
Se te extraña, Mabel.
PD: no he podido enviarte la carta antes, ya que las cosas no están bien por acá. Pablo llegó al hospital, pero una mujer de nombre afrancesado ha ido a sacarlo. María fue asesinada. La policía está segura de que fue a raíz de un robo, ya que no hubo saña (fue un solo cuchillazo) y faltan, aparentemente, los ahorros. Los enfermeros del Borda recuerdan que Pablo les habló de su hermana, pero que pretendía, también, olvidarla.

22 de octubre de 2006

Domingo

Así como el domingo termina el fin de semana tu actuar terminó todo lo que podía existir en mí.
Dormiste cada una de las palabras de aliento que me había dado, desarmaste cada una de las columnas que sostenían mi ilusión, destrozaste cada una de las piedras fundamentales de mis ideas, recreaste cada uno de los miedos que había eliminado, me devolviste cada una de las inseguridades que me habías permitido perder.
No sé qué tan a propósito fue tu andar. No estoy segura de que el destino haya trazado totalmente el camino. Algo tenés que haber elegido vos, que haber decidido, no puedo quitarte toda la responsabilidad.
Tampoco puedo quitarme la mía. Me advertiste, me dijiste que no lo hiciera. Y yo no te escuché, me dejé caer por semejante pozo. Y claro, cuanto más alto uno sube, más fuerte es la caída, no? Igual, estoy acostumbrada a chocarme con esa piedra. No fuiste el primero, no serás ni el último ni el único.
Gracias por hacerme sentir la princesa más bella del mundo, aunque fuese durante un tiempo. Gracias por revivir mi pasión, y prometo no dejarla ahora que me soltaste la mano. Gracias por ayudarme a volver a tener esperanza en los demás. Gracias por soltarme a tiempo, por dejarme escapar. Gracias por no darte cuenta de nada, por actuar sin pensar.
Sabías cuándo lloraba. Se nota que no lo sabés más.

28 de agosto de 2006

Envy*


I just can't bear it, it's like something taking me over, like a wave, a huge storm, something really unberable.*

One of the most ugly feelings, a revenge for the maker and the devil, a nightmare of pain inside the victim.*

Made by someone that it's away from it, that doesn't know anything about it.*

Someone who dind't do anything to bring it to life, or to make it feel alive.*

This poison kills you little by little and tears you apart into thousands of pieces, small annoying pieces that gets you down.*

You dind't do anything, it's my fault, I know. But they, yeah, the others, had so much to do about this! Much more than what the could never imagine...*

Envy*

16 de julio de 2006

Quién me va a venir a decir a mí...

  • Quién me va a venir a decir a mí que yo no sé lo que significa.
  • Quién me va a venir a decir a mí que al que le sucede, no se lo olvida jamás.
  • Quién me va a venir a decir a mí que la violencia es sólo la exacerbación de un estado agresivo.
  • Quién me va a venir a decir a mí que lo que duele, en realidad, no es tan así.
  • Quién me va a venir a decir a mí que no me imagino lo que sienten los que la reciben.
  • Quién me va a venir a decir a mí que no nos pasan por arriba y nos humillan cuando nos atacan.
  • Quién me va a venir a decir a mí que el 75% de los hogares lo sufren.
  • Quién me va a venir a decir a mí que no es un problema de la clase baja sólo.
  • Quién me va a venir a decir a mí que las que lo sufren se juntan luego con hombres violentos.
  • Quién me va a venir a decir a mí que aquellos niños que lo sufren después tiene problemas de relación.
  • Quién me va a venir a decir a mí que yo no me la puedo imaginar.

  • Quién me va a venir a decir a mí todo esto, si yo ya la viví.

12 de julio de 2006

Mi memoria y yo


Es sabido que la memoria no es infinita. También es sabido que tiene una especial predilección para retener las cosas que a uno le gustaría no recordar. Inútil es tratar de impedírselo, porque al hacerlo no estamos demostrando más que nuestra terquedad y necedad.

Hubiese esperado que mi memoria me jugara en contra, como suele hacerlo. Hubiese esperado que retuviera su rostro incluso cuando no cruzaba por mi ser en mucho tiempo. Sin duda, lo único que jamás me hubiese podido esperar era aquella reacción contradictoria que mi memoria tenía frente a su esencia. Así como lo recordaba, lo olvidaba. Así como no dejaba de aparecer en cada sueño que tenía, no podía recordar siquiera el color de sus ojos. Y así como aparecía, desaparecía.

Imprudentemente me recluí en mí para hacerlo desaparecer, mostrando así que cuando la necedad nos mueve, somos más ciegos que murciélagos. La soledad que todos tenemos dentro cuando realmente queremos aislarnos me impidió ver que no servía para nada. Me refugié en la intención de borrar de mí todo aspecto que incluyera su alma, eso que me hacía sentir. Lo borré incluso cuando me paraba en frente, cuando me hablaba, simplemente me iba de ese espacio y empezaba a borrar, recuerdo por recuerdo, todo aquello que identificaba su existencia.

Impresionante fue la forma en la que mi memoria, a causa de ese aspecto narcisista, ególatra y soberbio que tiene con respecto a la voluntad, sobrepasó todo límite imaginado, recluyendo así en una especie de caja fuerte todo lo que no tenía ganas de liberar.
Inútil es luchar contra la memoria, claro está. Lo que no saben es lo difícil que es hacerlo cuando el destino insiste negarnos una salida.

10 de julio de 2006

Esos ojos de muñeco...













Blue

When I look at them
Everything turns blue


I don’t like seeing the glass
Brake in front of me
I prefer to watch it shine
Instead of hiding within

Nothing can release me from them
I’ve seen them and I’ll never be the same


Free me now, stop holding my heart
Keep me here, let me free this mind
No, tomorrow you won’t look at me
You won’t do it, it’s like I just don’t exist
But I won’t turn my things blue for you


Turned my back to you
And looked at them again
Stop moving my beat
And I can’t find my rhythm once again

You’ve got my patience and my care
You know but is like if you don’t care


Free me now, stop holding my heart
Keep me here, let me free this mind
No, tomorrow you won’t look at me
You won’t do it, it’s like I just don’t exist
But I won’t turn my things blue for you


When I look at them
Everything turns blue


Free me now, stop holding my heart
Keep me here, let me free this mind
No, tomorrow you won’t look at me
You won’t do it, it’s like I just don’t exist
But I won’t turn my things blue for you

Why shouldn’t I just
Reach that sea?
Why won’t you let me
Be at that beach?
When those gems hold me
By my eyes
How can I tell you
“Here I am”?


Free me now, stop holding my heart
Keep me here, let me free this mind
No, tomorrow you won’t look at me
You won’t do it, it’s like I just don’t exist
But I won’t turn my things blue for you

--------------*--------------------------------

Con esos ojos aprendí lo que realmente significa la frase "amor platónico"... Bah, no es "amor", ni cerca!! Pero esos ojos me pueden... No sabés cómo me alegrás las clases...Jajaja... Si supieras algo... xD... O sea, nunca te vas a enterar de nada, porque sino pierde la gracia... Pero tenía que subir esto...Quizás lo suba al flog, pero no lo sé... Nunca se sabe quién lo puede ver, y aparte esos ojos son más que reconocibles...